Seguramente se trata de uno de los sabuesos franceses más antiguos, con una voz muy fuerte, que durante siglos se constituyo en la honra y el orgullo de la nobleza francesa que, incluso a través de la cacerías a caballo de animales salvajes de gran tamaño, tenía una forma de demostrar su grandeza. Hoy en realidad está poco difundido porque se prefieren los perros más veloces y con más energía como las otras razas de sabuesos franceses de más reciente creación, por las cuales sin embargo, sigue corriendo sangre de la suya.